The Man Of My Life. (El hombre de mi vida).
“Las paredes caerán quizás, y el sol puede rechazar brillar, pero cuando digo, te amo, tienes que saber que es para todos los tiempos. Nuestro amor es para todos los tiempos”.
Capítulo 61: “Un momento deseado”. (2da parte).
[Relata Michael].
Viernes 13 de septiembre de 1991.
Creía estar soñando, estaba convencido de estar sumergido en un hermoso sueño, aquel beso con Charlotte fue fantástico, era conciente de que me encontraba descansando, hice un esfuerzo por no despertar, pero el frió en mi cuerpo, hizo despertarme en plena madrugada, en esta oportunidad Charlotte se encontraba a mi lado, dormía profundamente, la contemple por un momento, y me lancé a sus brazos, eso hizo asustarla: - Oh, ¿Que sucedió? (Pregunto con voz de tener sueño) – Dime que esto no es un sueño, y que aquel beso fue real (Susurre a su oído mientras la abrazaba) – Tengo la misma duda que tu, aguarda, tienes el pijama que te di, eso quiere decir que no fue un sueño (Dijo observándome sonriendo) – Que bello rostro tengo en frente mió… (Mencione acariciándola) – No te oigo bien, ¿Puedes reiterarlo? (Menciono bromeando) – A ver… te explicare, la persona que tengo en frente mió, y en esta oportunidad, demasiado cerca, quise decir que eres hermosa, ¿Comprendes? (Dije sonriendo) – Si creo entender, aunque me quedan dudas, pero no vienen al caso, ¿Estabas despierto? (Pregunto riendo) – No, estaba profundamente dormido, pero sentí frió y desperté (Dije abrazándola) – Mmm… eso sucede por caminar bajo la lluvia, acaso… ¿No sabes que es otoño? Puede darte un resfrió, iré por una frazada, ya regreso (Comento incorporándose de la cama).
Espere un momento a que Charlotte regresara, y me acomode en la cama, era tan bonita esa sensación, la primera vez en que sentía amor verdadero, también la primera vez en que alguien me besaba con tanto amor y a la vez con demasiada fidelidad: – Listo, aquí tienes otra frazada, se te quitara el frió, ahora a dormir, hasta mañana (Dijo besando mi frente) – Aguarda, hay algo que deseo decirte, ahora… hay muchas cosas y momentos que termino de comprender, entiendo porque eras tan indiferente, porque me evitabas y lamento decirte que esos momentos llegaron a ponerme molesto y a la vez no entendía todo aquello (Dije mientras Charlotte acariciaba mi cabello) – Perdón por haberme comportado de esa manera, no deseo que tengas problemas y en ese tiempo trate de la misma manera a muchas personas, no deseaba que nadie me molestara, quería estar sola, muchas veces me maltratan y lo hacen sin conocerme, por eso preferí excluirme, hasta llegar a sentirme sola, fue terrible ese momento, pero de a poco ira pasando (Dijo bajando su mirada entristecida) – No tienes que pedirme perdón, ahora puedo darme cuenta que todo aquello que pasaste fue por mi culpa, Charlotte por favor discúlpame (Mencione con mis ojos llenos de lagrimas) – No no, tu no tienes que disculparte y mucho menos sentirte culpable, yo fui la culpable de todo aquello (Menciono tomando mi rostro y levantando mi mirada) – Es que… tu… tu sufriste por mi culpa, por no haber podido decir lo que siente tu corazón, lo siento tanto Charlotte (Dije mientras la abrazaba) – No Michael, no digas eso, yo fui quien no quiso decirlo, yo fui la que decidió sufrir de insomnio, y de llevar conmigo depresión, debo pedirte disculpas por hacerte sentir incomodo en algún momento, reconozco que lo hice, pero ya ni me atrevía a mirarte a los ojos, ahora soy yo quien te pide que no llores, ¿Si? Por favor (Susurro a mi oído) – Esta bien, ya no me regañes, pero veo que tu intención es cuidarme y no hacerme sentir mal, gracias, te quiero demasiado Charlotte Amstrong (Comente mientras ella secaba mis lagrimas) – Yo no te quiero, te amo Michael Jackson, y creo que comprendes la diferencia, no te obligare a que lo digas, entiendo tu situación, y cada cosa debe ir a su tiempo (Dijo mirándome a los ojos) – Gracias por tus palabras, me agrada oírlas y me gusta que me lo hagas saber, gracias por entenderme (Dije acariciando su rostro y deseando besarla) – Ahora ya lo sabes, ¿Se te quito el frió? (Interrogo sonriendo) – Si ya se me quito el frió esta frazada es abrigada, ahora dame la posibilidad de seguir durmiendo contigo, que descanses (Mencione acercándome a ella y besando sus labios tan fuerte con pude) – Esperaba un beso en la frente, pero esta bien ahora a dormir, que descanses (Dijo riendo nerviosamente). La observe un momento y quise dormir entre sus brazos, la abrase y nuevamente quedamos dormidos.
A la mañana siguiente de aquel viernes, desperté con algo de pesadez, mi reloj indicaba las 10.00 a .m., Charlotte no estaba a mi lado, creí que había ido a algún lugar, me levante y comencé a buscarla, no estaba en su sofá, en la cocina tampoco, ni en la otra habitación, en la sala comedor también, pero sobre la mesa estaba el ramo de flores colocado en un florero, y a un lado estaba la carta, Charlotte la había leído, estaba abierta, cansado de buscarla, me acomode en el sofá, al lado de “Bubbles” el oso que le obsequie cuando hacia meses que nos conocíamos, recordé con mucha felicidad aquella noche en que se lo entregue, y estuve observándolo un momento, Charlotte apareció saliendo de la habitación: - Hola Michael, ya despertaste, ¿Como estas? No quise despertarte y fui a darme un baño (Dijo en pijama mientras recogía su cabello) – Si, estoy bien, no te preocupes, no te encontraba por ninguna parte. No no, no lo recojas, nunca te vi con el cabello suelto, lo tienes demasiado largo y te queda precioso (Dije mientras la observaba) – es cierto, es que estoy acostumbrada a recoger mi cabello, pero esta bien lo dejare suelto, ¿Que hacías? (Pregunto acercándose al sillón) – Observaba todo por el ventanal, y veo que tienes a “Bubbles” aquí (Mencione señalando el enorme oso) – ¡Si! Es una gran compañía, un fiel amigo (Dijo sonriendo) – Me alegra que lo sea, ¿Recuerdas cuando te lo regale? (Pregunte tomándolo en mis brazos) – Jamás olvide aquel día, mira aquí esta tu ropa, ya esta seca, por si quieres ponértela (Comento mientras me entregaba la ropa) – Gracias, iré a alistarme, ahora regreso (Dije dirigiéndome a la habitación). Fui a cambiarme y regrese a donde se encontraba Charlotte: - Bueno, creo que llego la hora de irme (Dije yendo hacia la puerta de salida) – No no, no te iras ¿Verdad? Quédate al menos un momento mas (Menciono mientras corría hacia la puerta). Sin darme cuenta, Charlotte se antepuso en frente de la puerta, se veía tan divertida rogando que me quedara y por momentos era hasta extraño, la observe mientras reía y creo que comenzó a sentirse nerviosa ya que bajo su mirada mientras reía: - Y… ¿Que harás para que me quede aquí? (Pregunte mientras acariciaba su rostro) – Creo saber como hacer que te quedes aquí, preparare todas las tazas de chocolate caliente que quieras, te daré millones de paquetes de dulces y tal vez te haré muchas cosquillas (Dijo riendo) – Veo que me conoces, si es así me quedare, y quiero una taza de chocolate caliente ahora mismo (Explique bromeando y abrazándola) – Esta bien, preparare algo para desayunar, si quieres puedes ir al sofá, o hacer lo que quieras (Indico con entusiasmo) – Iré a tu cómodo sofá, me agrada estar allí, aguardare esa deliciosa taza de chocolate (Mencione mientras caminaba junto a ella).
Preparo un delicioso desayuno, mi favorita taza de chocolate caliente, unas galletas con sabor a vainilla, tostadas con jalea de frutilla, se sentó a mi lado en el sofá y mientras disfrutaba del desayuno, observe que Charlotte estaba pensativa, algo sucedía: - ¿Te sientes bien? ¿Porque tienes esa cara? (Pregunte con preocupación) – No, solo pienso, no es nada… (Dijo observando todo por el ventanal) – No creo que eso sea cierto, ¿Me quieres decir en que piensas? (Dije acariciando su cabello) – En como va a continuar todo esto, recuerda que tienes una vida y no estas solo (Menciono bajando tu mirada) – Si lo se, en realidad, no deseo pensar en eso, pero se muy bien lo que haré, ya no llevamos una buena relación con Lisa, ella se encuentra de viaje, hablare con ella, pero no diré nada sobre lo que sucede entre nosotros, ya que buscara un motivo para culparte (Explique levantando su mirada) –¿Se lo dirás? Eso quiere decir que aceptas todo lo que dije anoche (Menciono observándome con un brillo especial en sus ojos) – Claro, aguardare a que regrese en noviembre y hablare con ella, lo prometo, prometo que lo haré, y siento lo mismo que tu no es necesario que digas mas nada, tus palabras son de lo mas sincera y me hace tan bien oírlas (Dije tomándola de la cintura).
Terminamos nuestro desayuno, transcurrimos toda la mañana abrazados en aquel sofá, Charlotte reía a cada instante y me contagiaba verla así, luego almorzamos, hablamos de muchas cosas, vimos las fotografías que había en su closet y mientras me enseñaba sus trajes de ballet, quede dormido sobre la cama una vez mas, me sentía cómodo, sentía que al lado de ella podía ser Michael persona y no Michael artista.
Desperté por la tarde, y sobre la cama había una bandeja con la merienda lista para saborear nuevamente, mientras merendábamos pude sentir aquella sensación de protección al estar a su lado, luego devore un paquete de dulces, estaban deliciosos. Cuando la tarde comenzó a caer, me comunique con Silvestre para que viniera por mi y al saber que se demoraría, Charlotte pidió si la acompañaría a caminar, acepte con muchos ánimos, salimos algo abrigados ya que el clima era típico de otoño, había una leve llovizna, comenzamos a caminar y me indico un pequeño parque no muy lejano de su apartamento, era un lugar calido, demasiado tranquilo, fuimos a sentarnos en un banco a observar todo, y disimuladamente tome su mano, ella sonrió y comenzamos a reírnos, explico que iba a aquel lugar cuando necesitaba respirar aire, estuvimos un momento allí y regresamos al apartamento, mientras conversábamos, el timbre sonó, Silvestre aguardaba a que saliera, en el fondo no quería irme, deseaba estar junto a Charlotte, pero debía regresar, nos despedimos, pero deseaba besar sus labios nuevamente, regrese rápidamente y me despedí de ella llevándome su aroma y el sabor de sus labios conmigo.
Me sentía muy feliz, nunca antes me había sentido de aquella manera. Regrese a Neverland y todos me observaron en mi rostro era notable una sonrisa, una sonrisa especial, subí a mi recamara, cantando, riendo y con un sentimiento y difícil de explicar…
©SIEMPRE_MJACKSON The Man Of My Life.
¡Hola gente querida! Deseo que se encuentren muy bien. Yo aqui, muy contenta de poder subir dos nuevos capitulos el dia de hoy. He tenido un dia a las corridas, pero me hice un tiempo para subir capitulos como siempre lo prometo. Agradesco a las personas que siempre estan conmigo, me acompañan y alientan con mi novela. ¡Gracias! Particularmente me fascina esta foto, no se pero Michael tiene una sonrisa en especial, es por eso que la inclui en este capitulo. ¡Las quiero con todo mi corazon!
Yam! ♥
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